jueves, 3 de marzo de 2011

Algo nuevo..!!

hola pues despues de mucho muchooooo tiempo si pasar por aca, se me ocurrio dejarles algo, espero les guste..


PARTE I


Me sentía un poco harto al imaginar el tipo de sociedad con el que nos mesclaríamos, por desgracia no había podido persuadir a mis amigos de asentarnos en un lugar menos …rustico por decirlo de alguna manera, jamás podría acostumbrarme al barbarismo de esta gente, durante mi vida apenas había pasado unos días en comunidades como esta.

A pesar de las peticiones que había hecho a mis amigos no quisieron escucharlo, y como la educación lo exigía pasaría una temporada en la nueva residencia para ayudarlos a entender los negocios y la posición que debían ocupar en la sociedad, la reciente perdida del padre de Thomas y William los había dejado al frente de la fortuna de sir Thomas Kaulitz.

Mis amigos que eran gemelos y por esto compartían la responsabilidad de preservar el buen nombre de su desaparecido padre, habían buscado durante algún tiempo la propiedad en la que ahora habían decidido asentarse, dicha propiedad en si era bastante rentable, era su localización la que hacía que existieran tantos reparos, la sociedad campestre de Norttingan no podía ser mejor de cualquier localidad lejos de Londres y su sofisticación.

Vamos Gustav; este sitio no es tan malo – dijo William al ver mi expresión, solo levante la mirada, trataba con todos mis fuerzas ser menos inquisitivo con el lugar, pero sabía que mis temores no eran infundados.

La casa era bastante amplia y se bañaba espléndidamente con los rayos solares que entraban por las ventanas, la construcción además de práctica era muy bien orientada y aprovechaba las carencias de la ubicación, el salón y la biblioteca eran las habitaciones mejor confeccionadas en la casa, después de hacer el pequeño recorrido me excuse con Thomas y William y me aleja a la habitación.

No podía resistir quedarme hasta el final del otoño a la primera oportunidad me excusaría y volvería a la tranquilidad de mi hogar, tenía algunas horas antes de la cena por lo que decidí salir a montar un rato, en cuanto llegue a las caballerizas vi a Mesoar comiendo alfalfa en cuanto me vio, relinchó en señal de bienvenida.

- Tranquilo amigo – dije acariciando la suave crin color azabache, sin demorarme coloque yo mismo la silla no había ningún criado cerca y no quería que alguien supiera mi plan de escapar momentáneamente.

Cabalgué sin rumbo por la los prados; los árboles pronto se quedarían sin hojas, dándole paso al invierno, podía oír el cauce de un rio cerca; pensé que el caballo después del ejercicio necesitaría agua, disminuí la marcha y baje a las orillas del rio, acerqué a Mesoar que gustoso se inclinó para saciar la sed.

Me senté en una roca contemplando el pasaje, en realidad era muy hermoso, tranquilo sobre todo, después del extenso viaje, y la continúa conversación con los gemelos estos minutos de absoluto silencio eran magníficos.

Continúe observando y fue entonces cuando la vi, si no hubiera cambiado de hoja el libro que tenía en las manos tal vez nunca me hubiese percatado de su presencia tanto como ella no parecía saber de la mía.

Su vestido de un color café, casi a la par con el tronco del árbol la había camuflajeado, su melena estaba algo revuelta, pero lo que más capturo mi atención fue lo absorta que estaba en la lectura, pasaba las hojas del pequeño libro a una velocidad casi increíble, no creía que a esa velocidad de lectura realmente ella entendiera la esencia del libro.

No sabía qué hacer, no será correcto ir con ella, pero si regresaba con Mesoar, ella me escucharía, estaba forzado a pasar justo enfrente del árbol donde estaba recargada, me encontraba a mitad de mis reflexiones, cuando el caballo decidió por mí.

Después de saciarse del agua dio un relincho que nos hizo brincar a la extraña desconocida y a mí, la mirada contrariada de la chica busco la fuente del sonido y me traspaso, no tenía idea de cuál era mi expresión, ella se levanto precipitadamente e hizo una reverencia, respondí con una igual, ella inclino la cabeza en respuesta, dio media vuelta y se perdió en el bosque.

Caminé hacia el caballo aún sin saber el por qué me había perturbado tanto la presencia de esa chiquilla, era como cualquier otra persona que disfrutaba de un paseo en la tarde, tal vez no era en si la joven; sino el sentirme vigilado cuando creía estar completamente solo.

Regrese a la casa; Thomas me esperaba en la entrada.

- Bonita tarde para un paseo- dijo viéndome bajar de Mesoar.

- Si en realidad lo es – dije.

- La cena estará en unos minutos, será mejor que te cambies, señor explorador- dijo sarcásticamente.

Caminé a mi habitación, mi ayuda de cámara Ben, y estaba ahí y tenía mis prendas listas, en menos de 15 minutos estaba listo y bajando los escalones al comedor.

La cena fue muy agradable una plática entre amigos, William me pidió que lo ayudara en los negocios que tenia la siguiente mañana debía hablar con algunos granjeros y terratenientes que necesitaban su cooperación, para que prosperaran sus propiedad tanto como los gemelos los necesitaban con el mismo fin.

Después de una partida de billar donde fui vencido por Thomas, pero derrotando a William, nos retiramos a dormir, estando en mi habitación y con la luz de la vela iluminando tenuemente la recámara, la desconocida del río regreso a mi mente.

No sabía por qué seguía perturbándome ese insignificante encuentro, puse la vela en la cómoda cercana a la cama, sople para apagarla y deje que mi mente se hundiera en el sueño.



de que creen que sea?.... si les gusto namas me dejan un comente y subo mas....


domingo, 24 de octubre de 2010

Memorias y Complicaciones

Capitulo I

Llevaba noches sin dormir aun no me reponía a la separación sabía que había hecho lo correcto, pero eso no hacía que la agonía fuera menos dolorosa, aun pensaba tortuosamente en el. Que sería de mi señor ahora que lo había abandonado; tenía sus palabras grabadas como el fuego en mi memoria´´ mi jane sería el mejor consuelo y recompensa sin el estoy maldito ‘, mi rostro se humedeció con el recuerdo de sus palabras, mi huida de Thonrfield hall me había separado del único hogar que había conocido, hoy me encuentro en la casa de una amable familia que me ha resguardado de la cruda madre naturaleza justo en el momento en el que creí reunirme con el creador St Jhon Rivers me ha salvado sus hermanas Mary y Diana han sido más amables de lo que una mendiga como yo puede esperar.

Los días pasaron y mi energía volvía poco a poco, después de unas semanas las hermanas debían volver a sus trabajos como institutrices y Moore House seria cerrada ya que St Jhon vivía en la rectoría del pueblo siendo el clérigo, mi camino debía partir de esta casa en donde había encontrado el consuelo; mi destino era incierto, pero el señor Rivers me encontró un trabajo digno y honesto

Días antes de la partida de Diana y Mary Rivers me instale en la pequeña casa que ahora sería mi hogar, a partir de ahora seria la maestra de una escuela rural para niñas, a pesar del arduo trabajo que me esperaba y lo ocupada que estuve después del inicio de la escuela el señor Rivers siempre llegaba por las tardes al termino de la jordana escolar, su plática aunque poca siempre me develaba una inteligencia muy bien desarrolladas

Por las noches cuando estaba sola mi corazón no podía evitar recordarlo, sentir que se partía con el solo recuerdo, el consuelo de haber hecho lo correcto no me serbia de bálsamo para curar las heridas, amaba como nunca podría amar al señor Rochester el había sido el mejor hombre y me amaba de igual manera aun así ceder a la tentación me hacia traicionar mis principios, lo amaba, pero era prohibido para mí su esposa se interponía entre nosotros, Bertha Mason sin tener la culpa era la culpable de mi pena más grande.

meses pasaron y las niñas progresaban, mi corazón aunque aun herido estaba más tranquilo, St Jhon se había convertido en un asiduo visitante y me descubrí ansiosa por sus visitas, después del matrimonio de la señorita Oliver (antiguo amor de St Jhon, la mujer que el amaba pero descarto como esposa, al no soportar la idea de renunciar a su vocación…ser misionero) la perspectiva de verlo me agradaba demasiado temi estar confundiendo las atenciones del señor Rivers, pero aun mas torturada me sentía al pensar absurdamente que le faltaba al señor Rochester, mi corazón le pertenecía, pero saba que nunca estaríamos juntos.

Era muy entrada la noche de nuevo las pesadillas volvían, seguía viendo el rostro de Betha Mason, arrancándome de los brazos del señor Rochester veía la lucha de mi señor, pero de nuevo Mrs Rochester se interponía entre nosotros, desperté con la cara bañana en lagrimas, el sueño era real al menos en lo más esencial, Edward mi amado señor Rochester seguía casado con esa mujer y mi amor no podía ser correspondido.

Los días en la pequeña escuela rural eran bastante activos, las niñas mis alumnas habían logrado progresar de sobremanera, pero en las tardes a excepción de las visitas del St Jhon, me sentía completamente sola, el señor Rivers noto mi estado de animo una fría tarde de Noviembre, la atmosfera que envolvía los paramos, era demasiado similar a la de Thorfield, el aire frio movia los arboles y una pequeña mata de niebla se abria paso entre los terrenos de la escuea, recordé como si fuera ayer mi primer encuentro con el orgulloso dueño de Thornfield Hall, el camino desierto la niebla cubriendo el paso, el oído de cascos acercándose, pilot saliendo de la niebla, Mesoar el hermoso caballo alzándose en las patas traseras gracias al jalon de estribos que e sñor Rochester le hizo para librarme del camino, veía la manera ruda y grosera con la que se había expresado al levantarse del frio suelo, veía sus penetrantes ojos perforándome.

El toque en la puerta me saco de mis ensoñaciones.

- Señorita Elliot- esta usted bien- decía la voz de St Jhon Rivers al otro lado de la puerta.

Si enseguida voy, conteste levantándome y limpiando las lagrimas que habían brotado de mis ojos consecuencia del recuerdo.

Con paso veloz alcanze la puerta y deje entrar al señor Rivers

Me examino con mirada critica, no sabia si en mi rostro aun había rastros de las lagrimas.

Tomo mi mano con suavidad y me condujo cerca del fuego.

- Se que no debe ser fácil, el estar aquí sola, sin familia y como unica amistad a un clérigo huraño y extraño como yo, pero debe tratar de no dejarse vencer por las tentaciones, usted esta aquí a dejado un pasado atrás-

me tense al oi la mension del pasado, para los Rivers yo era alguien que se había perdido en el paramo, Diana y Mary alguna vez trataron de averiguar mi procedencia, pero no tenia la entereza y el valor para decirlo, sabia que el señor Rochester debía estar buscandome y no podía dejar que el supiera algo de mi

- No se preocupe, no pienso indagar – dijo al ver mi tensión- solo quiero darle mi opinión en cuanto a la manera en la que a mi parecer usted debe proceder, no tengo idea de las circunstancias que la trajeron a este lugar, pero no debe pensar en ellas, si no en ver hacia el futuro, el señor nunca nos pone pruebas que resulten ser demasiado para nuestras fuerzas, tan pronto como encuentre la resignación, estará bien-

Era cierto, por mas que me dolieran las circunstancias, el señor Rochester nunca podría estar conmigo y yo nunca con el, St John tenia razón mi lugar ahora estaba aquí con las niñas ayudándoles a progresar, y debía resignarme, pero podría hacerlo, de verdad era tan simple, no lo sabia pero tenia que hacer algo, el simple acto de recordarlo no podía suceder mas, mientras mas pronto lo expulsara de mi mente, mejor.

jueves, 19 de agosto de 2010

Demetri: segunda parte




El camino de regreso a Volterra fue tenso, nuestros lideres no estaban para nada felices con el resultado, ellos creían que para cuando entráramos de nuevo en su Ciudad ellos se habrían quitado a los Cullen de encima.

los dias pasaron y el ambiente en volterra volvia a ser el mismo, aunque Aro seguia pensando en como acabar con los Cullen, lo cual para mi sorpresa me tenia inquieto.

Una noche paseando por la ciudad, felix se acerco a mi.


Ya basta demetri- dijo en tono serio -no puedes seguir asi... Es muy peligroso para tí... y para los que sabemos tu "secreto" si alguno de ellos se llegara a dar cuenta.

- no se de que me hablas- dije tratando de irme, sabia perfectamente de que hablaba, por lo que sabia Jane se habia regodeado diciendole a casi todos mis sentimientos por Tanya, asi que a estas alturas toda la guardia lo sabia.

-a no sabes de que te hablo, bien te refrescare la memoria- dijo mordazmente.- me refieron a cierto amiga de los cullen, se que es por ella por quien te comportas raro, pero debes saber que no hay manera en la que ella te acepte...no despues de lo ocurrido hace unas semanas, no solo lo que paso con Irina, recuerda lo que paso con la vampira a la que llamban madre, recuerda lo que le hicimos, se las razones que tuviste para hacerlo, pero ella no las conoce y eso te convierte en el ser que mas odia en este planeta - me vio con ojos de compasión y palmeó mi hombro en señal de apoyo

lo se- dije exasperado- pero no puedo evitarlo, se que ahora no me queda nada, no se por q seguir aqui o donde sea, no se que hacer con esta vida, lo que antes veia como una existencia bastante comoda, ya no lo es para nada, me siento vacio, por primera vez desde que soy un no-muerto, me siento realmente como un cadaver, no tengo nada por lo que luchar, exepto mi vida y mi estadia en la guardia, pero no se si eso sea suficiente.

- No debes hablar asi, esto pasara, solo tienes que hacerte a la idea de que tu vida es aqui en la guardia con el tiempo la olvidaras, no tienes un futuro con ella, a si que deja de torturarte.

-Tienes razon- le dije con una sonrisa y una calma que no sentia, simplemente no queria mas sermones, ademas debia aprender a mentir incluso a mis amigos, si queria sobrevivir.

Las semanas pasaban y mi animo no mejoraba al contrario, cada que pensaba en ella era como una tortura, ni Jane podia producir ese tipo de dolor.

los calles de la gran ciudad estaban desiertas, la luna llena invadia con su luz cada rincon de la plaza, era una vista hermosa, pero yo no podia sentir nada.

de las penumbras una figura llamo mi atencion, era Heidi que hablaba con Felix al parecer discutian.

- Pero el tiene derecho a saberlo- decia fuertemente Heidi, me extraño que le hablara asi a Felix, ellos siempre se habian llevado bien.

- no vez que eso solo lo inquietara- decia Felix con voz firme- pense que sentias algo pot el- concluyo mi amigo.

-presisamente por eso, el no me perdonaria que no se lo dijera, ademas el no me quiere al menos no del modo que yo quiero- al final se le quebro un poco la voz

- si el se entere , es el fin de lo de ustedes, lo sabes?-

-claro que lo se, no soy idiota, pero no puedo obligarlo a que me quiera- dijo rapidamente Heidi- Aro esta desquisiado quiere vencer como sea a los Cullen y empezara quitando del camino a sus amigos, sabemos que los mas cercanos son las denali.

No tenia que escuchar mas, con eso entendi todo, no dejaria que ellos me vieran eso los pondria en peligro, pero tenia que hablar de frente con Aro .

Lo busque por todo el palacio hasta que lo encontre en la sala de audiencias, Renata como casi siempre estaba a su lado.

- Demetri, a que debemos esta repentina entrada- Aro extendio la mano para tocar la mia, pero retrocedi un paso, no queria que supiera mis pensamientos necesitaba gritarselos yo a la cara.

-Se lo que planeas para las Denali, crei que cuando me uni a la guardia habiamos acordado algo?- le dije rapidamente recordando las circunstancias por las que me habia unido a los vulturis

Renata me veia con los ojos como platos, nunca le habia hablado tan directo a Aro, pero ahora no estaba de humor para esas formalidades de decirle amo, despues de todo el planeaba matar a lo unico que valia la pena en esta existencia.

- A si fue, no lo he olvidado- dijo tranquilamente Aro, pero habia un brillo extraño en su mirada, lo que me hizo desconfiar.

-Entonces me puedes explicar, como es que planeas debilitar a los cullen ocupandose de sus amigos y aun asi no dañar a Tanya?-

Aro poso sus ojos en mi , pude ver que estaba algo desconcertado, pero eso no duro mucho, rapidamente cambio su postura y endurecio la voz.

- te atreves a cuestionar mis intenciones, si nuestro acuerdo fue no dañar a Tanya lo sera para siempre, pero no dijimos nada de sus hermanas. - termino de decirlo con una nota de pesar, como si la muerte de Irina en verdad fuera algo que no hubiera estado dispuesto a efectuar.

El matar a la unica hermana que le queda, la dejara destrozada, no puedes hacer eso- dije casi bufando de la ira, no podia creer que habia servido fielmente al ser que queria destruir a lo unico que valia para mi.

Esta bien, tienes mi palabra , no dañare a las denali, a menos que ella rompan la ley- dijo Aro.- eso es todo? -pregunto

No- dije rapidamente- quiero dejar la guardia, este ya no es mi lugar y como siempre se ha dicho, nadie esta aqui por la fuerza, asi que le pido que me libere de mis obligaciones como parte de la guardia.

Despues de unos segundos de silencio, en los que los ojos de Renata iban de su amo hacia mi, Aro rompio el silencio y con una amabilidad que estaba seguro era fingida me libero de la guardia.

-por supuesto mi querido Demetri, sabes que eres totalmente libre, no te niego que es una gran perdida para la guardia, pero aqui tienes un lugar, por si cambias de opinion.- dijo acercando su mano para despedirse, aunque sabia de sobra que lo que en verdad queria era saber mis pensamientos, no habia forma de negarse, asi que le di la mano.

despues de un segundo que parecio una eternidad la despedida termino, yo me retire hacia mi habitacion para recoger algunas cosas y despedirme de Felix y Heidi.

Aun no podia creer que en verdad era libre, pero debia darme prisa y salir de volterra, no pensaba regresar nunca.

de todas la cosas que tenia en la habitacion solo tome un anillo habia sido de mi padre y tenia el escudo de la familia, dos espadas entrelazadas, con un aguila y un leon a cada lado.

Sali a la busqueda de las unicas dos personas a las que verdaderamente extrañaria.

Demetri- dijo Heidi antes de corres hacia mi y darme un fuerte abrazo.- es cierto lo que se dice?- pregunto desconcertada.

- si , me voy,- al decirlo noté que su expresion se entristecia.

- Prometeme que te cuidaras- dije con la voz gentil, aunque ella no lo supiera, gracias a ella podria salvar a Tanya.

-Ya sabes que siempre lo hago-dijo con voz apagada y media sonrisa en los labios.

La abrase para despedirme, ahora sabia que nunca habia sido solo diversion para ella, y me sentia culpable al pensarlo, pero no podia amarla, no como ella se merecia.

-Por favor, cuidate y trata de ser feliz, si ella es lista, te aceptara, yo lo haria- dijo con la voz rota, justo antes de darme un fugaz beso en los labios e irse.

Mi despedida de Felix fue muy diferente, en no entendi el por que mi necesidad de irme.

-No puedo creer lo tonto que eres- decia - aqui tienes todo, nadie se mete con nosotros, literalmente la comida viene a nosotros, lo unico que tenemos que hacer es servil fielmente y es todo, no veo el caso de vivir como un nomada, por alguien que nunca te perdonara.

De verdad entendia su reaccion, pero estaba empezando a molestarme , no tenia que restregarme en la cara que nunca podria estar con ella, eso lo sabia de sobra.

-Lo sé, pero eso no quiere decir , que por que ella no me acepte yo tenga que vivir aqui como esclavo, por que es lo que somos, hasta les decimos Amo, por favor Felix no te engañes, sabes que por lo unico que estamos aqui es por nuestros dones, si no desde hace mucho que nos hubieran exterminado.

-Puede que eso sea cierto, pero acaso crees que Aro la dejara en paz, por q te lo prometio- dijo sarcasticamente.

-Ya se que no sera asi, pero no permitire que nada le pase- dije de manera amenazadora.

-No quiero luchar contigo, pero si causas un problema no tendre alternativa, tu has dejado la guardia, pero mis lealtades aun son para Aro, Marco y Cayo- dijo Felix con el mismo tono que yo habia empleado para con el.

Entiendo, -dije friamente- bueno esta es nuestra despedida, espero que nos volvamos a ver sin la nesecidad de que alguno tenga que acabar muerto- dije antes de salir de Volterra.

Vague por Europa, no sabia que hacer con mi recien adquirida soledad, tenia mucho en que pensar, estaba ansioso por verla, pero tenia que buscar el momento oportuno, y tenia que ser sin que ella me viera, o podrian complicarse las cosas.

Despues de pasar dos semanas en Londres tratando de convencerme de que el ir a Alaska era una mala idea, no pude mas y tome el primer vuelo hacia America.

Llegue muy temprano apenas estaba amaneciendo, asi que tuve q esperar practicamente todo el dia en el aeropuerto, fue algo realmente dificil, habia demaciados humanos y la sed me quemaba la garganta cada que un humano pasaba demaciado cerca, pero no podia dejar que a estas alturas los Vulturia tuvieran la oportunidad de darme caza por haber matado unos cuantos humanos en el aeropuerto a la vista de todos.

Como pude, llegue a la puesta de sol.

Cruze las enormes puertas del aeropuerto en Toronto, no habia encontrado un lugar mas cercano, asi que haria corriendo el resto del camino hacia Denali.

Aun tenia mucho camino por recorrer, pero mis ansias por verla aunque ella no pudiera verme, el sentirme libre de verla era una sensacion totalmente nueva para mi...




continuara....