jueves, 19 de agosto de 2010

Demetri: segunda parte




El camino de regreso a Volterra fue tenso, nuestros lideres no estaban para nada felices con el resultado, ellos creían que para cuando entráramos de nuevo en su Ciudad ellos se habrían quitado a los Cullen de encima.

los dias pasaron y el ambiente en volterra volvia a ser el mismo, aunque Aro seguia pensando en como acabar con los Cullen, lo cual para mi sorpresa me tenia inquieto.

Una noche paseando por la ciudad, felix se acerco a mi.


Ya basta demetri- dijo en tono serio -no puedes seguir asi... Es muy peligroso para tí... y para los que sabemos tu "secreto" si alguno de ellos se llegara a dar cuenta.

- no se de que me hablas- dije tratando de irme, sabia perfectamente de que hablaba, por lo que sabia Jane se habia regodeado diciendole a casi todos mis sentimientos por Tanya, asi que a estas alturas toda la guardia lo sabia.

-a no sabes de que te hablo, bien te refrescare la memoria- dijo mordazmente.- me refieron a cierto amiga de los cullen, se que es por ella por quien te comportas raro, pero debes saber que no hay manera en la que ella te acepte...no despues de lo ocurrido hace unas semanas, no solo lo que paso con Irina, recuerda lo que paso con la vampira a la que llamban madre, recuerda lo que le hicimos, se las razones que tuviste para hacerlo, pero ella no las conoce y eso te convierte en el ser que mas odia en este planeta - me vio con ojos de compasión y palmeó mi hombro en señal de apoyo

lo se- dije exasperado- pero no puedo evitarlo, se que ahora no me queda nada, no se por q seguir aqui o donde sea, no se que hacer con esta vida, lo que antes veia como una existencia bastante comoda, ya no lo es para nada, me siento vacio, por primera vez desde que soy un no-muerto, me siento realmente como un cadaver, no tengo nada por lo que luchar, exepto mi vida y mi estadia en la guardia, pero no se si eso sea suficiente.

- No debes hablar asi, esto pasara, solo tienes que hacerte a la idea de que tu vida es aqui en la guardia con el tiempo la olvidaras, no tienes un futuro con ella, a si que deja de torturarte.

-Tienes razon- le dije con una sonrisa y una calma que no sentia, simplemente no queria mas sermones, ademas debia aprender a mentir incluso a mis amigos, si queria sobrevivir.

Las semanas pasaban y mi animo no mejoraba al contrario, cada que pensaba en ella era como una tortura, ni Jane podia producir ese tipo de dolor.

los calles de la gran ciudad estaban desiertas, la luna llena invadia con su luz cada rincon de la plaza, era una vista hermosa, pero yo no podia sentir nada.

de las penumbras una figura llamo mi atencion, era Heidi que hablaba con Felix al parecer discutian.

- Pero el tiene derecho a saberlo- decia fuertemente Heidi, me extraño que le hablara asi a Felix, ellos siempre se habian llevado bien.

- no vez que eso solo lo inquietara- decia Felix con voz firme- pense que sentias algo pot el- concluyo mi amigo.

-presisamente por eso, el no me perdonaria que no se lo dijera, ademas el no me quiere al menos no del modo que yo quiero- al final se le quebro un poco la voz

- si el se entere , es el fin de lo de ustedes, lo sabes?-

-claro que lo se, no soy idiota, pero no puedo obligarlo a que me quiera- dijo rapidamente Heidi- Aro esta desquisiado quiere vencer como sea a los Cullen y empezara quitando del camino a sus amigos, sabemos que los mas cercanos son las denali.

No tenia que escuchar mas, con eso entendi todo, no dejaria que ellos me vieran eso los pondria en peligro, pero tenia que hablar de frente con Aro .

Lo busque por todo el palacio hasta que lo encontre en la sala de audiencias, Renata como casi siempre estaba a su lado.

- Demetri, a que debemos esta repentina entrada- Aro extendio la mano para tocar la mia, pero retrocedi un paso, no queria que supiera mis pensamientos necesitaba gritarselos yo a la cara.

-Se lo que planeas para las Denali, crei que cuando me uni a la guardia habiamos acordado algo?- le dije rapidamente recordando las circunstancias por las que me habia unido a los vulturis

Renata me veia con los ojos como platos, nunca le habia hablado tan directo a Aro, pero ahora no estaba de humor para esas formalidades de decirle amo, despues de todo el planeaba matar a lo unico que valia la pena en esta existencia.

- A si fue, no lo he olvidado- dijo tranquilamente Aro, pero habia un brillo extraño en su mirada, lo que me hizo desconfiar.

-Entonces me puedes explicar, como es que planeas debilitar a los cullen ocupandose de sus amigos y aun asi no dañar a Tanya?-

Aro poso sus ojos en mi , pude ver que estaba algo desconcertado, pero eso no duro mucho, rapidamente cambio su postura y endurecio la voz.

- te atreves a cuestionar mis intenciones, si nuestro acuerdo fue no dañar a Tanya lo sera para siempre, pero no dijimos nada de sus hermanas. - termino de decirlo con una nota de pesar, como si la muerte de Irina en verdad fuera algo que no hubiera estado dispuesto a efectuar.

El matar a la unica hermana que le queda, la dejara destrozada, no puedes hacer eso- dije casi bufando de la ira, no podia creer que habia servido fielmente al ser que queria destruir a lo unico que valia para mi.

Esta bien, tienes mi palabra , no dañare a las denali, a menos que ella rompan la ley- dijo Aro.- eso es todo? -pregunto

No- dije rapidamente- quiero dejar la guardia, este ya no es mi lugar y como siempre se ha dicho, nadie esta aqui por la fuerza, asi que le pido que me libere de mis obligaciones como parte de la guardia.

Despues de unos segundos de silencio, en los que los ojos de Renata iban de su amo hacia mi, Aro rompio el silencio y con una amabilidad que estaba seguro era fingida me libero de la guardia.

-por supuesto mi querido Demetri, sabes que eres totalmente libre, no te niego que es una gran perdida para la guardia, pero aqui tienes un lugar, por si cambias de opinion.- dijo acercando su mano para despedirse, aunque sabia de sobra que lo que en verdad queria era saber mis pensamientos, no habia forma de negarse, asi que le di la mano.

despues de un segundo que parecio una eternidad la despedida termino, yo me retire hacia mi habitacion para recoger algunas cosas y despedirme de Felix y Heidi.

Aun no podia creer que en verdad era libre, pero debia darme prisa y salir de volterra, no pensaba regresar nunca.

de todas la cosas que tenia en la habitacion solo tome un anillo habia sido de mi padre y tenia el escudo de la familia, dos espadas entrelazadas, con un aguila y un leon a cada lado.

Sali a la busqueda de las unicas dos personas a las que verdaderamente extrañaria.

Demetri- dijo Heidi antes de corres hacia mi y darme un fuerte abrazo.- es cierto lo que se dice?- pregunto desconcertada.

- si , me voy,- al decirlo noté que su expresion se entristecia.

- Prometeme que te cuidaras- dije con la voz gentil, aunque ella no lo supiera, gracias a ella podria salvar a Tanya.

-Ya sabes que siempre lo hago-dijo con voz apagada y media sonrisa en los labios.

La abrase para despedirme, ahora sabia que nunca habia sido solo diversion para ella, y me sentia culpable al pensarlo, pero no podia amarla, no como ella se merecia.

-Por favor, cuidate y trata de ser feliz, si ella es lista, te aceptara, yo lo haria- dijo con la voz rota, justo antes de darme un fugaz beso en los labios e irse.

Mi despedida de Felix fue muy diferente, en no entendi el por que mi necesidad de irme.

-No puedo creer lo tonto que eres- decia - aqui tienes todo, nadie se mete con nosotros, literalmente la comida viene a nosotros, lo unico que tenemos que hacer es servil fielmente y es todo, no veo el caso de vivir como un nomada, por alguien que nunca te perdonara.

De verdad entendia su reaccion, pero estaba empezando a molestarme , no tenia que restregarme en la cara que nunca podria estar con ella, eso lo sabia de sobra.

-Lo sé, pero eso no quiere decir , que por que ella no me acepte yo tenga que vivir aqui como esclavo, por que es lo que somos, hasta les decimos Amo, por favor Felix no te engañes, sabes que por lo unico que estamos aqui es por nuestros dones, si no desde hace mucho que nos hubieran exterminado.

-Puede que eso sea cierto, pero acaso crees que Aro la dejara en paz, por q te lo prometio- dijo sarcasticamente.

-Ya se que no sera asi, pero no permitire que nada le pase- dije de manera amenazadora.

-No quiero luchar contigo, pero si causas un problema no tendre alternativa, tu has dejado la guardia, pero mis lealtades aun son para Aro, Marco y Cayo- dijo Felix con el mismo tono que yo habia empleado para con el.

Entiendo, -dije friamente- bueno esta es nuestra despedida, espero que nos volvamos a ver sin la nesecidad de que alguno tenga que acabar muerto- dije antes de salir de Volterra.

Vague por Europa, no sabia que hacer con mi recien adquirida soledad, tenia mucho en que pensar, estaba ansioso por verla, pero tenia que buscar el momento oportuno, y tenia que ser sin que ella me viera, o podrian complicarse las cosas.

Despues de pasar dos semanas en Londres tratando de convencerme de que el ir a Alaska era una mala idea, no pude mas y tome el primer vuelo hacia America.

Llegue muy temprano apenas estaba amaneciendo, asi que tuve q esperar practicamente todo el dia en el aeropuerto, fue algo realmente dificil, habia demaciados humanos y la sed me quemaba la garganta cada que un humano pasaba demaciado cerca, pero no podia dejar que a estas alturas los Vulturia tuvieran la oportunidad de darme caza por haber matado unos cuantos humanos en el aeropuerto a la vista de todos.

Como pude, llegue a la puesta de sol.

Cruze las enormes puertas del aeropuerto en Toronto, no habia encontrado un lugar mas cercano, asi que haria corriendo el resto del camino hacia Denali.

Aun tenia mucho camino por recorrer, pero mis ansias por verla aunque ella no pudiera verme, el sentirme libre de verla era una sensacion totalmente nueva para mi...




continuara....

2 comentarios:

**George** dijo...

todavia no han escrito una tercera??

**George** dijo...

No han escrito una tercera parte de la historia de demetri??